8 de Marzo, mi propio clavel y Alfa

El lunes llegué al CEPA como cualquier otro día… preparada para aprender cosas nuevas. Y el director me llamó al despacho… ¿Qué quería? Pues regalarme un clavel rojo, igual a las demás profesoras del Centro. ¿El motivo? Pues que era el día de la mujer trabajadora, 8 de Marzo. Me dijo que era costumbre «de la casa» regalar un clavel rojo a las mujeres que trabajaban allí… y como tal me consideró. 

Ese día también entré en mi primera clase de alfabetización. Sólo había cuatro personas, pero no dejé de hacer cosas. Estuve leyendo con varias personas y la verdad es que es basante reconfortante. Había una señora procedente de un país islámico que casi no hablaba español. Sin embargo conectò muy bien conmigo y cada vez que entendía algo me daba las gracias. Cuando se fue me dio dos besos, y todavía no ha dejado de hacerlo al final de cada clase.

Después de unas horas de mates y naturales con mi grupo, y otra más de Español con mis amigos los chinos, llegué a casa medio muerta. Eso sí, con mi clavel en la mano, mi primer clavel de mujer trabajadora.

IMPROVISO MI PRIMERA CLASE

Desde el primer día de prácticas he estado en clase de Español como Lengua Extranjera (E.L.E.) en las dos últimas horas de la joranda. Los alumnos de estas clases proceden mayormente de China.

En las clases de E.L.E. hay quienes no hablan casi nada de español y otros que hablan basante bien (también van a academias), pasando por los que comprenden pero no hablan y viceversa, o tienen buena gramática pero no conversan.

Lo que se hace en la clase es hablar, dependiendo del nivel, constuir frases, escribirlas, leerlas, pronunciarlas correctamente, dictados, comprensión escuchando una cinta de español hablado, et.

La metodología es un aprendizaje relajado (casi todos vienen de trabajar) y divertido, a través de actividades que despiertan su interés y requieren atención. Pero lo fundamental es que las clases se basan primeramente en la confianza. Todos los alumnos escuchan a la maestra (e incluso a mí) con mucha atención y seguridad en lo que les decimos.

Exáctamente en mi séptimo día de prácticas, la profesora de E.L.E. enfermó y se tuvo que marchar. Yo me quedé sola y di la clase (porque yo quise, evidentemente, no estaba obligada). 

Improvisé. Empleé los trucos y formas de explicar que había visto utilizar a la profesora. Los alumnos ya me conocían y me entendieron, a pesar de ser de primero y no hablar mucho español. Estuvimos repasando los verbos (en presente), hicimos una ficha de frases y luego les fui diciendo que se inventaran otras y las escribieran en la pizarra. Las leímos todos a la vez y repetí el proceso para las formas negativas.  

Fue una experiencia genial, porque siguieron mi clase igual que seguían la de su profesora, me hicieron caso y no me sentí en ningún momento perdida, ni bloqueada. El ambiente estaba relajado porque ellos siempre hacen bromas, y hubo un momento que me costó parar de reír para seguir con la clase.

Digamos que todo fue sobre ruedas y, por primera vez en mi vida, yo me sentí profesora.

Nuevas Tecnologías… desde el primer día

Casi no me acordaba yo de aquello de las nuevas tecnologías… creo que cuando estudié secundaria fui dos o tres veces contadas a dar una clase al aula de informática (¿en francés?) y sólo había cursillos por las tardes, o sea, fuera del horario lectivo.

Años después, cuando vuelvo a la enseñanza obligatoria (de prácticas de maestra), los alumnos aprenden biología en el aula de informática. Y todos son mayores que yo. Paradógico.

Estoy en un Centro de Educación para Adultos, es decir, enseñando a personas que bien podrían mis padres o mis abuelos, contenidos que yo aprendí hace muchos años. Y además ellos tienen recursos nuevos que yo apenas vislumbré: nuevas tecnologías.

Después de unas eficaces presentaciones con los profesores del Centro, aclaración de horarios y una fugaz visita guiada, nos vamos a clase de biología con el jefe de estudios. El curso en el que entramos es cuarto, que equivale casi al último ciclo de Primaria (4º y 5º). Los alumnos son en su mayoría adultos, seguidos de personas de avanzada edad y un pequeño porcentaje de jóvenes mayores de 18 años.

Mi primera clase: biología en el aula de informática.

Mi primera intervención: ayudar entrar a la página de proyecto biosfera (MEC) a una alumna.

Conclusión: las nuevas tecnologías no son el futuro, son el presente más absoluto, para todas las edades, en todos los ámbitos.

La metodología de la clase es que los alumnos van leyendo los contenidos del aparato circulatorio en la página: http://recursos.cnice.mec.es/biosfera/alumno/3ESO/aparato_circulatorio/contenidos7.htm

Luego hacen las actividades y esto me da pie a ir por las mesas resolviendo dudas, ayudando con los ordenadores, conociendo al personal… Y todos me hacen caso desde el primer cuarto de hora.

De esta forma, cada uno va aprendiendo a su ritmo, de forma interactiva, haciendo ejercicios (según comprendan una cosa pasan a la siquiente).

Me llama la atención cómo se manejan algunos alumnos bastante mayores, sobre todo con el ratón.

El maestro para la clase de vez en cuando con el mando del ordenador principal (bloquea a los demás y todos ven sólo la pantalla que maneja el profesor). Entonces da las explicaciones pertinentes, pero sin tecnicismos, con sus propias palabras. Algunos quieren una definición exacta para copiarla y aprendérsela.

………….el tiempo se pasa volando…………..

La siguiente clase es matemáticas, que sigue la misma metodología, y también se basa en actividades interactivas.

Por último bajamos al aula y continuan haciendo deberes de mates. Mi papel es el mismo, me muevo por las mesas.

UNA SEMANA… Y COMO EN CASA

Sinceramente, hace una semana, ni yo ni mi compañero de prácticas, David, sabíamos absolutamente nada de lo que iba a pasarnos en nuestro centro de prácticas.

Como los dos tenenemos las mañanas ocupadas, por razones varias, necesitábamos escoger un Centro de Educación que impartiera clases por las tardes. Y los niños de Primaria en los Colegios Públicos sólo tienen clase por las mañanas (las horas que necesitamos impartir en el Prácticum). Afortunadamente, dentro de nuestras competencias se encuentra la Educación de Personas Adultas, con horario de mañana y tarde.

Al principio me daba un poco de miedo esto de la Educación de Adultos (no me van a hacer ni caso, me van a ver como a una cría, me van a pillar…). Sin embargo, es una experiencia que recomiendo encarecidamente a todas las personas a las que les guste enseñar, dedicarse por entero a suscitar el aprendizaje de personas que no han tenido oportunidad de ir a la escuela, que vienen de otros países o que han encontrado su sitio en un instituto. La sensación de satisfacción, de ver el deseo de aprender en los ojos de las personas que van a escucharte, digas lo que digas, es un premio que vale todo el trabajo de una vida.

El centro de prácticas, cerca de la calle Ferrocarril (Madrid), no es muy grande, tiene un aula para cada uno de los seis grupos que dan clase allí. Un par de departamentos, la jefatura, la sala de profesores (donde ya nos han hecho nuestro hueco), biblioteca, aula de informática, hall, sevicios… Muy bien equipado pero todo dentro de un ambiente familiar, recogido…

El profesorado nos ha acogido con mucha amabilidad, nos ha dado libertad en todo el centro y en sus clases. Nos tratan como a nuevos profesores: tenemos llaves, estantería para nuestro material, sabemos la clave de la fotocopiadora… y nos presentan amablemente a los alumnos.

El alumnado nos trata con respeto y con cariño, confía en nosotros desde el primer día en que entramos por la puerta, nos pregunta y también nos comprende y nos aconseja…

Hoy ha sido el cumpleaños de David, que nos ha traído pasteles y los ha dejado en la sala de profesores, luego ha abierto su regalo  y el personal le ha tratado como si le conociera de toda la vida.

Yo me siento casi como si todos fuéramos una gran familia…

FEBRERO

Llegados a este punto de la carrera, si pudiéramos parar el mundo una fracción de segundo, nos veríamos a nosotros mismos en el principio de un largo camino. Pero al volver la vista atrás vemos  los pequeños cimientos que hemos adquirido en la facultad: documentación, mucha teoría, creatividad, exámenes, amigos, una mentalidad, ganas de mejorar algunos aspectos de la educación, horas de estudio inútiles, horas de trabajo muy productivas… en definitiva, lo que viene siendo el aprendizaje inicial.

Todo esto no lo cuento detalladamente porque es una vida universitaria como otra cualquiera y los materiales están expuestos, los que merecen la pena, en toda mi web. Lo más importante es que ya hemos acabado los exámenes, la teoría, y la verdad es que ha costado sudor, lágrimas, estrés, desesperación, fuerza para seguir adelante… pero también muchas alegrías y satisfacción al terminar.  Habrá que ver lo que nos sirve a partir de ahora… aunque leyendo entre líneas podría sorpechar qué va a ser lo más útil.

Pero…¿y la experiencia?…será mejor que miremos hacia delante…: mi expleriencia tiene exactamente una semana de vida.

BLOG DEL PROFESOR

El blog del profesor sirve para colgar apuntes, trabajos, enlaces, textos, documentación… y que los alumnos accedan a toda la información desde sus casas. También es un medio de comunicación con los padres. En definitiva, un medio de relación profesor-alumnos-padres muy propia del siglo XXI.

En mi caso, como todavía no soy maestra, lo utilizaré para colgar mis andanzas de aprendiz: apuntes, trabajos, reflexiones… es decir, toda clase de material que me va a servir, espero, para mi futuro docente.

Esta página es la única más personal, sobre mis aventuras, ya que las demás están dedicadas a documentos, enlaces e información «en bruto».

ORIGEN DEL BLOG

Este blog es creado en la asignatura de Nuevas Tecnologías durante el tercer curso de la diplomatura de maestro de Educación Primaria. Se va a utilizar como diario de clase, archivador de materiales y recursos didácticos, sitio de reflexión y será evaluado al final del cuatrimestre.